UNA LEYENDA VIVA DE
EL PASTOR DEL GORBEA
Jacinto Sagarna,
en su retiro de Tudelilla (
Los aficionados a
Aunque su auténtico nombre es el de Jacinto Sagarna, es mucho más conocido por el seudónimo que lo hizo
un personaje famoso, casi legendario: "el pastor del Gorbea". Nació
en Zeanuri y allí vivió hasta los 18 años, ejerciendo
la profesión de pastor desde los 9. Pasaba temporadas de hasta seis meses en el
monte, donde subía el 1 de mayo y ya no bajaba hasta estar cercana
Fue hacia esa edad cuando empezó a "coger el tiempo". Poco a poco fue afinando sus pronósticos, de modo que empezó a hacerse conocido por sus predicciones y colaboró en El Correo Español, más tarde en Deia y también otros periódicos, Radio Vitoria, etc. Dejó de colaborar en ellos por el mucho tiempo que le ocupaba: las buenas predicciones exigen la observación "in situ" de los vientos, de las nubes, los humos, los animales, las plantas, etc.
Pero su método básico fueron siendo las témporas, muy extendidas en las montañas vasconavarras, que pronostican el tiempo de cada estación partiendo de lo acontecido el miércoles, viernes y sábado previos al equinoccio o al solsticio.
Jacinto Sagarna guarda
en su casa las notas de Justo Unzueta Solaegui, de
Durango, con todas las referencias sobre las témporas y el tiempo sucedido, día
a día y año a año desde comienzos de los
"Todo el mundo entiende que las
predicciones del pastor del Gorbea sobre el tiempo que tendremos son cultura
popular, tradición... y nadie llama a esto "meteorología
alternativa", sencillamente porque no utiliza métodos científicos".
Curioso. Algo similar soltó Manuel Toharia, actual director del Museo de las Artes y las
Ciencias de Valencia en un libelo publicado en 1992 (Mc Graw Hill) que llevaba
por título Astrología, ¿ciencia o superstición? ¡Como si la ciencia se
redujese únicamente a la vía estrecha del reduccionismo! En fin, nos
preguntamos por lo que habrían hecho Armentia y Toharia, dos líderes de la lucha antiastrológica
actual, en tiempos del Concilio de Trento, creador del Tribunal de
Septiembre 2003