UNA LEYENDA VIVA DE LA METEOROGNOMÍA ESPAÑOLA:

EL PASTOR DEL GORBEA

Volver a la página anterior

Volver a la página inicial

Contactar con el autor

Jacinto Sagarna, en su retiro de Tudelilla (La Rioja)

Los aficionados a la Meteorología Empírica, y desde luego también muchos agricultores y gentes del mundo rural, conocen bien este nombre, vizcaíno salido de las montañas vascas y que actualmente vive jubilado en la riojana localidad de Tudelilla. Se hizo famoso por sus colaboraciones en los medios de comunicación, que lo llamaban cada trimestre para dar cuenta de sus témporas y pronósticos del tiempo realizados a la más vieja usanza: comportamiento animal, observación de las nubes y vientos, etc.

Aunque su auténtico nombre es el de Jacinto Sagarna, es mucho más conocido por el seudónimo que lo hizo un personaje famoso, casi legendario: "el pastor del Gorbea". Nació en Zeanuri y allí vivió hasta los 18 años, ejerciendo la profesión de pastor desde los 9. Pasaba temporadas de hasta seis meses en el monte, donde subía el 1 de mayo y ya no bajaba hasta estar cercana la Navidad. Poco después de los 18 años cambió de oficio: se hizo vinatero y puso una bodega en Berriz.

Fue hacia esa edad cuando empezó a "coger el tiempo". Poco a poco fue afinando sus pronósticos, de modo que empezó a hacerse conocido por sus predicciones y colaboró en El Correo Español, más tarde en Deia y también otros periódicos, Radio Vitoria, etc. Dejó de colaborar en ellos por el mucho tiempo que le ocupaba: las buenas predicciones exigen la observación "in situ" de los vientos, de las nubes, los humos, los animales, las plantas, etc.

Pero su método básico fueron siendo las témporas, muy extendidas en las montañas vasconavarras, que pronostican el tiempo de cada estación partiendo de lo acontecido el miércoles, viernes y sábado previos al equinoccio o al solsticio.

Jacinto Sagarna guarda en su casa las notas de Justo Unzueta Solaegui, de Durango, con todas las referencias sobre las témporas y el tiempo sucedido, día a día y año a año desde comienzos de los 60. A sus 67 años, el pastor del Gorbea es depositario de un conocimiento a punto de extinguirse, y que para Javier Armentia, director del Planetario de Pamplona y martillo de herejes modernos, no guarda especial interés:

"Todo el mundo entiende que las predicciones del pastor del Gorbea sobre el tiempo que tendremos son cultura popular, tradición... y nadie llama a esto "meteorología alternativa", sencillamente porque no utiliza métodos científicos".

Curioso. Algo similar soltó Manuel Toharia, actual director del Museo de las Artes y las Ciencias de Valencia en un libelo publicado en 1992 (Mc Graw Hill) que llevaba por título Astrología, ¿ciencia o superstición? ¡Como si la ciencia se redujese únicamente a la vía estrecha del reduccionismo! En fin, nos preguntamos por lo que habrían hecho Armentia y Toharia, dos líderes de la lucha antiastrológica actual, en tiempos del Concilio de Trento, creador del Tribunal de la Santa Inquisición...

Septiembre 2003

Volver a la página anterior

Volver a la página inicial

Contactar con el autor