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EL PRONÓSTICO DEL TIEMPO
A LARGO PLAZO. Métodos tradicionales.
Libro II: Tratado de Astrometeorología
Hasta hace unos años, fue una creencia general el
que había una relación entre
Roto el hilo de
Son los propios meteorólogos quienes descartan a
priori no sólo la influencia de los astros en el tiempo meteorológico, sino
también particularmente la de
Por otra parte, alrededor de toda
Es ésta la opinión generalizada en el mundo
científico... saltándose a la torera los trabajos irreprochables de otros
colegas que ya hace años demostraron rigurosamente el vínculo existente entre
Son bastante conocidas, al menos en círculos
astrológicos, las constataciones estadísticas sobre
Correlación entre la lluvia y las fases lunares según Bradley, Woodbury y Brier (de Los relojes cósmicos, Michel Gauquelin, 1970).
El peso de la ciencia anglosajona ha favorecido
el conocimiento de estos trabajos; otros más antiguos, más completos más
documentados y cercanos a nosotros apenas han tenido repercusión alguna ni en
el campo científico ni en el astrológico. Nos estamos refiriendo a los trabajos
del Observatorio del Ebro, institución creada en 1905 por los jesuitas, y entre
ellos el Padre Cirera, pionero en su día en el campo
de
Fue el Padre Luis Rodés
quien estudió las relaciones entre
* * *
Dificultad en relacionar
Entre los fenómenos terrestres que más se quieren
relacionar con
...Mas antes de entrar
de lleno en dicho estudio hemos de formular una advertencia, y es que la
mayoría de los astrónomos y meteorólogos consideran desprovista de fundamento
la creencia tan fuertemente arraigada en el vulgo, que atribuye a nuestro
satélite un influjo preponderante sobre los estados lluviosos. Los tales pueden
cohonestar su escepticismo: primero, en los resultados inciertos en la mayoría
de los trabajos realizados hasta el presente; segundo, en que siendo las mismas
para todo el globo las fases y las variaciones de distancia de
Sobre lo primero, desgraciadamente, hay que dar
la razón a los astrónomos y meteorólogos, por la evidente deficiencia de la
mayoría de los estudios emprendidos con objeto de dilucidar el problema. Sobre
lo segundo, no parece deba dárseles así como así la razón, pues también el Sol
es el mismo para todo el planeta, y sin embargo nadie pone en duda que sea el
responsable último de las principales perturbaciones atmosféricas: es que
los dos astros, Sol y Luna, con ser los mismos para toda
Con todo, no cabe duda de que, tratándose de
Examinemos ahora los tres períodos lunares, que a priori pueden influir en los cambios atmosféricos:
1º) De fase a fase o revolución sinódica,
es el período en el cual,
2º) De perigeo a perigeo o mes anomalístico,
o valor medio de los intervalos de tiempo que separan dos pasos consecutivos de
3º) De nodo a nodo a revolución draconítica, o intervalo que separan dos pasos
consecutivos de
Estos tres períodos, sujetos a fuertes
perturbaciones, tienen como mínimo común múltiplo suficientemente aproximado,
el período llamado de los Saros (18 años, 11 días y 8 horas), que
equivale a 223 revoluciones sinódicas, 239 revoluciones anomalísticas y 242
revoluciones draconíticas. Pero ni siquiera al cabo
del período de los Saros se repiten las mismas condiciones en la
posición de
Los datos pluviométricos del Observatorio del
Ebro en España, utilizados para la presente investigación, comprenden 250
ciclos lunares, duración tenida generalmente por suficiente para descubrir
cualquier influjo de nuestro satélite sobre la lluvia, si lo hubiese, y para
excluir el efecto debido a causas fortuitas. Las variantes principales en
1º) Distancia de
2º) Distancia angular Luna-Sol, que determina su fase: nueva, creciente, llena, menguante.
3º) Declinación o ángulo con el plano del ecuador celeste y altura con relación al horizonte del observador.
4º) Paso por el meridiano local, u hora lunar.
Para valorar el carácter estadístico que nos
ocupa no debe olvidarse nunca el cotejo de los resultados con el llamado factor
de contingencia. En nuestro caso el factor de contingencia se determina
escogiendo al azar grupos de fechas de mes, cuyo número corresponda
aproximadamente al número de las que entran en juego alrededor de la variante,
cuya influencia en el tiempo se pretende determinar, y proporcionan una base de
comparación para distinguir la dispersión debida exclusivamente a causas
fortuitas, de la que reconoce como causa el influjo de
Pasemos ya a declarar los resultados obtenidos con los datos procedentes del Observatorio del Ebro, según los dio a conocer su extinto director, Padre Luis Rodés, S.J., en una de las mejores memorias que existen sobre la materia.
Las variaciones de
El efecto de la declinación es el que mejor han puesto de relieve las estadísticas del Observatorio del Ebro. Se observa un exceso de lluvia con declinación positiva, que para el decenio 1910-1919 alcanza el 27%, y para el decenio 1920-1929 llega a 13,5%, y para el período de 20 años el exceso de lluvia es del 20%. Este resultado refleja con suficiente evidencia un influjo real de nuestro satélite en la condensación y precipitación del vapor de agua en el seno de nuestra atmósfera, por basarse en las estadísticas de 7.300 días de observación, con 1.615 días de lluvia, y porque el exceso de un 20% durante la mitad del tiempo en que nuestro satélite ha tenido declinación Norte es muy superior al que puede esperarse del acaso.
Con declinación Norte, la estadística indica que llueve un 20% más que con declinación Sur en el Bajo Ebro.
Para comprobarlo, es decir, para determinar el
factor de contingencia, basta dividir el período total de 20 años en dos
grandes mitades, según la declinación Norte y Sur de
Más marcada es la diferencia entre dos promedios cuando se comparan los valores correspondientes a posiciones extremas de nuestro satélite al Norte y al Sur del ecuador o lunisticios; el exceso de la lluvia caída durante los 247 lunisticios Norte alcanza un 43% respecto a la caída en igual número de lunisticios Sur.
Doble es la estadística preparada para correlacionar la distancia lunar y la lluvia; en una se han tomado grupos de 5 días centrados alrededor de las fechas del perigeo y apogeo, y en la otra, por separado, se ha extendido la investigación a 5 días antes y cinco días después de las fechas arriba mencionadas, con lo que se han obtenido dos grupos de 11 días para cada una de las mismas.
El resultado de la primera estadística, a base de grupos de 5 días, da un exceso de un 17% para el perigeo, respecto del apogeo. El resultado de la segunda estadística, a base de 11 días agrupados en torno del perigeo y del apogeo, da una cantidad de lluvia 23% superior en torno del perigeo con respecto de la lluvia caída en torno del apogeo.
Llueve más en los días próximos al perigeo (a) que en
los del entorno del apogeo (b), entre un
La dispersión máxima hallada en promedio de 6 grupos escogidos al azar da tan sólo 1,29 y 1,31%, mientras que la obtenida para un número mayor de fechas clasificadas según la distancia lunar es como queda dicho, de un 23%, o sea, 15 veces superior. La evidencia, pues, a favor de un influjo, si bien exiguo y en cada caso particular velado por el factor casualidad, de la distancia lunar y también de la declinación, en la cantidad de lluvia caída en el Observatorio del Ebro, resulta en conjunto de tal forma que no es posible dudar de su realidad (todos los subrayados son nuestros).
Averiguando que las dos variantes, declinación y distancia, actúan en el mismo sentido en la cantidad y frecuencia de la lluvia local, podíase ya prever que el efecto resultaría mucho más sensible si se agrupasen fechas en las que estas mismas variantes estuviesen acordes en fase.
El resultado fue completamente el previsto, con
un total de lluvia igual a
...Para el estudio en el que se valora el efecto de la hora lunar se han tomado no 20, como en los anteriores, sino 30 años de registros, que hacen cerca de 11.000 días con más de 9.000 horas lluviosas anotadas, según el ángulo horario de nuestro satélite. Se ha procurado una mayor acumulación de datos para este efecto, por entender que su influjo sobre la lluvia había de ser necesariamente mucho más débil y más expuesto, por consiguiente, a ser desfigurado por el efecto de causas fortuitas. La distribución de las horas, según la hora lunar, se parece mucho a la correspondiente a la hora solar, con un máximo principal entre 15 y 16 horas lunares y con un mínimo entre 6 y 7 lunares, siendo el exceso del máximo sobre el mínimo del 35%...
Las horas lluviosas arrojan un máximo entre las 3 y las 4 de la "tarde lunar", que supera en un 35% al mínimo.
...Para correlacionar la fase lunar con la lluvia
se han comparado aisladamente los datos procedentes de los dos días que siguen
a la fecha del novilunio con los dos que siguen a la fecha del plenilunio.
Se han obtenido dos grupos de 643 y
Para comprobar la relación existente entre las
nubes y
...La mayor cantidad de nubes en el grupo de 1.235 fechas alrededor del plenilunio descuella en forma tal, que no es posible atribuirlo a la casualidad, pues el exceso hallado alcanza un 8%, cuando en los grupos de 1.200 fechas al azar, el exceso del promedio máximo sobre el promedio mínimo sólo es del 2%, o sea, 4 veces inferior...
...No deja de ser bien curioso que el influjo
real de
En cuanto al viento, se advierte en el
Observatorio del Ebro una extraordinaria disminución de su recorrido medio en
las 1.235 fechas alrededor del plenilunio; su valor es hasta 8 veces
superior a la desviación media de los 14 grupos integrados por un número
equivalente de fechas, incluso la dispersión máxima en los promedios
provenientes de 8 grupos de 1.200 fechas, a base del día del mes, junto con los
otros 4 de 1.235 fechas a base del perigeo-apogeo y del cuarto creciente-cuarto
menguante. Este resultado debe atribuirse a una acción real de
En cuanto a la presión, ninguna conclusión permite deducir los promedios hallados respecto a la influencia que sobre la atmósfera ejercen la fase y la distancia lunar: la dispersión de los grupos a base lunar es inferior a la obtenida en los grupos de 1.200 fechas al azar, lo cual no excluye el que en otras regiones o en otras estadísticas pueda encontrarse.
En cambio, el paso de
En cuanto a la temperatura, puede preverse a priori que ninguna correlación debe ligarla con las variantes lunares... De hecho la dispersión hallada en el Observatorio del Ebro no llega a 4 décimas de grado (0,39° ) y es casi exactamente la misma en los grupos de fecha a base de la fase y de la distancia que en los grupos de base fortuita.
...El vulgo cree firmemente que el tiempo cambia
con
Conclusiones deducidas de los registros del Observatorio del Ebro
Del análisis de las estadísticas del Observatorio del Ebro puede considerarse plenamente establecido el influjo de las tres variantes lunares, declinación, distancia y paso por el meridiano sobre la cantidad de lluvia: este influjo, si bien es real, alcanza poca intensidad, y lejos de manifestarse con la evidencia con que aparece el influjo solar, se presenta tan sólo como entre celajes y de una manera discontinua... el influjo preponderante es el de la declinación, y a éste sigue el de la distancia...
... Aparece igualmente cierto el influjo de la fase
lunar en la cantidad de nubes y en el recorrido diario del viento, con
mayor nubosidad y más calma atmosférica en las fechas alrededor de
La creencia vulgar de que el tiempo cambia con
Esta demostración de la realidad del influjo lunar en el tiempo reviste excepcional interés desde el punto de vista teórico, no así desde el punto de vista práctico...
...No se crea que estos resultados provengan de
ideas preconcebidas, favorables a un influjo real de
* * *
Los trabajos del Observatorio del Ebro no han sido la excepción en esta materia, y de hecho, antes de darlos a la luz, fueron cotejados con otros realizados en observatorios de diversas partes del mundo; veamos a este respecto los comentarios del Padre Puig:
Aun cuando los resultados obtenidos, al analizar las estadísticas del Observatorio del Ebro, no dejan lugar a duda sobre la realidad del efecto lunar, el Padre Luis Rodés, S.J., quiso comprobarlo con los datos provenientes de otros cuatro observatorios, a saber: Marseille, Paris, Potsdam y New York. La cantidad de lluvia resultó ser, en conjunto, 29% mayor en las fechas del perigeo con declinación positiva, lo que confirma los resultados del Ebro y afianza la tesis de la realidad del influjo lunar. Con todo, débese hacer resaltar:
1º) Que la amplitud de la oscilación en los datos del Observatorio del Ebro es muy superior a la registrada en las demás estaciones.
2º) Que la amplitud es prácticamente nula en París.
3º) Que el efecto es inverso, por lo que toca al número de días lluviosos, en París y en Potsdam...
...Cuando las estadísticas se extienden a un período de tiempo suficientemente largo, el que los resultados obtenidos sean diferentes, según las condiciones locales del punto de observación, nada prueba en contra de la realidad del influjo lunar, ya que igual heterogeneidad presenta el influjo del Sol, a pesar de ser de una intensidad mucho mayor.
* * *
En cuanto a las posibles causas a las que pueda atribuirse el efecto lunar sobre el tiempo, sigue diciendo el Padre Puig:
...El Padre Rodés, en
su estudio sobre el influjo de
Tomando +15° como declinación lunar media en el primer grupo de fechas en torno del perigeo y -15° en el grupo opuesto en torno al apogeo, la intensidad de la radiación lunar tendrá un 58% de exceso en el grupo de fechas con declinación positiva.
La intensidad de la radiación es también
modificada por el cambio de distancia. Si tomamos
El efecto marea, inversamente proporcional a la
tercera potencia de la distancia, varía en un 23%, y consideramos muy probable
se deba a él la acción diferencial de
Esta explicación, a juicio del Padre Rodés, viene corroborada además por el análisis de las
gráficas del Observatorio del Ebro. Así, la que corresponde a la declinación,
no sólo indica mayor cantidad de lluvia y mayor número de días lluviosos, sino
que, además, presenta dos máximos bien definidos en las dos posiciones extremas
de
Nota final
El trabajo original al que hace referencia el Padre
Ignacio Puig (quien de algún modo popularizó el del Padre Luis Rodés) se publicó en Tortosa en 1937, en plena Guerra
Civil. Memorias del Observatorio del Ebro Nº 7. ¿Influye
Como cosa curiosa
podemos decir que el año en que este trabajo vio la luz, el Padre Rodés, como director del Observatorio del Ebro en esa
difícil etapa de